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Autor: Vicente Blasco Ibáñez
Año de publicación: 1916
Editorial: Alianza Editorial
Últimamente, cuando leo novela que no es juvenil, prefiero que sean clásicos. Me sucede que, leyendo narrativa contemporánea, suelo saber lo que va a suceder, cosa que me frustra bastante. No me sucede eso con los clásicos, y así voy buscando libros de distintos autores que contribuyan, además, a incrementar mi cultura literaria. En el caso de Blasco Ibáñez, me llamó la atención su fama en Estados Unidos a principios del siglo XX, que llevó a la adaptación cinematográfica en Hollywood de varias de sus novelas con actores muy conocidos. Entre dichos títulos destacan Sangre y arena, La tierra de todos y la que nos ocupa, Los cuatro jinetes del Apocalipsis.
La novela se centra en la vida de la familia Desnoyers, y la historia se inicia cuando Marcelo Desnoyers, un joven francés, emigra a Argentina a finales del siglo XIX huyendo de la guerra. Allí trabaja para un ganadero latifundista español, con cuya hija mayor, Luisa, se casa, y tiene dos hijos: Julio y Luisa, a la que llaman Chichí. De manera paralela, la hija menor del ganadero se casa con otro trabajador, en su caso alemán. Ambos matrimonios con sus hijos se trasladan a Europa, los unos a Francia y los otros a Alemania, a principios del siglo XX, con la amenaza de una nueva guerra entre ambos países en el ambiente. No obstante, Julio y Chichí ignoran dicha amenaza, sumergidos como están en la vida parisina: cuando estalla el conflicto, las vidas de todos los integrantes de la familia Desnoyers se ve alterada por completo.
Podrían llenarse bibliotecas enteras con novelas dedicadas a las guerras, sobre todo a las dos Guerras Mundiales. En el caso de Los cuatro jinetes del Apocalipsis, quizá lo más curioso sea que Blasco Ibáñez la redactó durante el conflicto, por lo que su testimonio posee un carácter veraz, directo, cercano, y transmite muchos acontecimientos con la crudeza de quien los ha presenciado, como la escena que cierra la novela, que lógicamente, acaba antes que la propia guerra, pues cuando Blasco Ibáñez la escribió, la contienda no había terminado. Las partes dedicadas a la guerra en sí contrastan vivamente con el largo capítulo de flashback en el que el autor nos presenta a los personajes en Argentina, cuyo estilo remite a los autores hispanoamericanos. Los fragmentos en los que relata la vida de los personajes en París antes de la guerra tienen ecos del Naturalismo español de finales del siglo XIX, y toda la obra está empapada con un estilo panfletario muy típico del Blasco Ibáñez político, en el que llama la atención la crudeza con la que retrata a los alemanes como los "malos" no ya de la guerra, sino de la Historia y del mundo.
Puntuación: 7
No he leído el libro aunque sí he visto la pelicula basada en él. También muy cruda y sobre todo muy pesimista... Besitos!
ResponderEliminarYo no he visto ninguna de las películas basadas en el libro, aunque como comento en la crítica, siempre me llamó la atención el éxito que tuvieron las novelas de Blasco Ibáñez en Hollywood en vida del autor y después.
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