miércoles, 31 de agosto de 2011

Seikimatsu Occult Academy

Imagen de instantz.net
Título: Seikimatsu Occult Academy
Estudio de animación: Aniplex
Número de episodios:13
Distribuidora en España: Ninguna
Emisión original: 2010

Después de tanto tiempo sin ver anime (quién me ha visto y quién me ve...), una sugerencia por parte de una amiga me ha descubierto esta serie de temática sobrenatural y demás, tan de moda en Japón. Los japoneses tienen como afición tomar referencias culturales de todas partes y mezclarlas en una suerte de popurrí en sus producciones, y para comprobarlo no hay más que jugar a cualquier Final Fantasy. Pues bien eso es lo que hacen con Seikimatsu Occult Academy.

Maya Kumashiro regresa a la academia fundada por su padre, que acaba de morir. La institución tiene como objeto el estudio de toda suerte de fenómenos paranormales, pero Maya, que los odia, asume el puesto de directora con la ambición de acabar con la academia. Sin embargo, entre ella y su objetivo se sitúa Fumiaki Uchida, un joven enviado del futuro para impedir el suceso que, de acuerdo con la profecía de Nostradamus que anunciaba el fin del mundo en 1999, evite cierto suceso que debe tener lugar en ese año y que desemboca en el mundo del que él viene: un futuro apocalíptico en que la Tierra ha sido invadida por alienígenas. Aunque ese asunto ni le va ni le viene a Maya, y así se lo dice, se da cuenta de que va a tener que ayudarle tanto si le gusta como si no.

Como pasa en muchas series actuales, Seikimatsu cuenta con un número de episodios relativamente reducido, lo que desemboca en un desarrollo de la trama un tanto superficial, como sin ahondar del todo, y el grueso de la historia se resuelve en los dos últimos episodios. Se trata de una manera de proceder bastante habitual en las series de los últimos años, que en el caso de Seikimatsu me ha provocado la sensación de que no se nos acaba de contar todo con la profundidad adecuada, y que quedan aspectos por desarrollar, sobre todo en lo que a la personalidad de los distintos personajes se refiere. Si de Maya y Fumiaki quedan puntos oscuros por esclarecer, de los personajes secundarios no digamos, que en más de un episodio quedan como meras comparsas; a algunos, directamente, aunque revelan cerca del final una importancia bastante más relevante de lo que anunciaban en un principio, se les podía haber sacado bastante más jugo.

En resumen, no puede decirse que Seikimatsu Occult Academy sea una mala serie, ni mucho menos, pero le falta algo. No sabría decir qué exactamente, aunque es posible que sea sólo un poquito más de profundidad.

Puntuación: 6

lunes, 29 de agosto de 2011

El cuaderno de Maya

Imagen de www.casadellibro.com
Título: El cuaderno de Maya
Autor: Isabel Allende
Año de publicación: 2011
Editorial: Plaza Janés

Heme aquí, la que se prometió no volver a leer nada de Isabel Allende cayera quien cayese (no por nada, sino porque sus libros, salvo honrosas excepciones, me parecen aburridos, tal y como ya manifesté al leeme La isla bajo el mar). Al parecer, esta idea no caló en mi principal proveedora de libros, es decir, mi madre, ya que a mi regreso de Berlín me encontré con El cuaderno de Maya encima de mi escritorio. ¿Qué iba a hacer? Le di las gracias por el regalo y empecé a leérmelo tan pronto como terminé Lo que el viento se llevó. Poco motivada, decidí darle una oportunidad.

La protagonista, Maya Vidal, es una joven de diecinueve años de nacionalidad estadounidense y ascendencia chilena que se dedica a narrar su vida desde su exilio en Chiloé, una diminuta isla chilena. Entremezclados con los pasajes de su infancia y adolescencia nos relata cómo se va acostumbrando paulatinamente al país de su abuela, a su gente y sus tradiciones. Cuando se centra en su pasado, descubrimos que su turbulenta adolescencia es consecuencia directa de una infancia en la que fue demasiado mimada por sus abuelos en ausencia de sus padres y del papel fundamental que supuso la muerte de su abuelo, al que adoraba, en el desarrollo de su historia posterior.

Lo cierto es que, aunque el enfoque de la historia y el desarrollo de su protagonista parecen novedosos, y al menos la autora logra que la novela no se haga pesada como otras de su producción anterior, el trasfondo de El cuaderno de Maya es el mismo de las obras anteriores de Isabel Allende; pretende que la historia nos dé pena para que empaticemos mejor con la protagonista y su dolor, pero llega un momento que el masoquismo como lectores se nos acaba, o a mí al menos. Aunque la manera de alternar pasado y presente en la narración tiene su interés, y no voy a negar que me he enganchado en algunos pasajes, no logra conectar del todo con la manera de expresarse de la muchacha. No sé muy bien por qué, pero no dejaba de ver a Isabel Allende entre las líneas de la historia supuestamente narrada en primera persona.

Puntuación: 7

sábado, 27 de agosto de 2011

Supersalidos

Imagen de Wikipedia
Título: Supersalidos (Superbad)
Director: Greg Mottola
Intérpretes: Jonah Hill, Michael Cera, Christopher Mintz-Plasse, Emma Stone
Año de estreno: 2007

Como siempre que me reúno con mis amigos, toca comedia. Y ya que nos conocemos y sabemos qué nos hace gracia, nos decantamos por probar Supersalidos, esa película casi de culto a cuyos traductores del título asesinaría. Francamente, tenía ganas de ver esta película porque sale Michael Cera, cuyos personajes siempre me encantan; estar con mis amigos contribuyó a lanzarme a los brazos de esta comedia de adolescentes que nos arrancó buenas carcajadas...

Seth, Evan y Fogell son los tres típicos pardillos del instituto. Están terminando su último curso juntos antes de marcharse a la Universidad y sólo tienen un pensamiento en la cabeza: sexo. Seth, el más obsesionado de los tres, promete a Jules, la chica de sus sueños, que será su proveedor de alcohol para la fiesta que va a celebrar, y no duda en arrastrar consigo al tímido Evan, que a su vez bebe los vientos por la amiga de Jules, Becca, y al que consideran aún más pringao que ellos, Fogell. Éste se hace con un falso carné de donante de órganos hawaiiano que le identifica como McLovin y entra en un comercio para comprar la bebida, pero justo cuando va a pagar tiene lugar un robo en el local que queda a cargo de dos policías colgaos... Y desde ese momento, la noche se les escapa de las manos.

Supersalidos es la enésima epopeya estudiantil sobre unos chavales obsesionados con "mojar" que acaban descubriendo la amistad y/o el amor, pero por el camino nos obsequia con situaciones delirantes pero no del todo improbables (nunca se sabe con las fiestas salvajes...), aunque sinceramente, los mejores momentos corren a cargo de los dos policías, a los que dan vida Seth Rogen y Bill Hader como un par de auténticos descerebrados; me atrevo a decir que, sin ellos, la película no tendría ni la mitad de gracia. Jonah Hill y Michael Cera se limitan a repetir sus papeles habituales, lo cual no quiere decir que no tengan sus momentos, la verdad es que hacen buena pareja cómica, sus personajes se complementan muy bien.

En pocas palabras, si aún queda alguien que no haya visto Supersalidos, ¿a qué esperáis? Si no os asustan la comedia gamberra, unos adolescentes hasta las orejas de testosterona y algo de humor grueso, os la recomiendo para echar la tarde con los colegas. No es una película de Óscar, pero, eh, no sólo de obras maestras vive el hombre.

Puntuación: 8

jueves, 25 de agosto de 2011

Super 8

Imagen de Wikipedia
Título: Super 8
Director: J. J. Abrams
Intérpretes: Joel Courtney, Elle Fanning, Kyle Chandler, Riley Griffiths
Año de estreno: 2011

Para mi generación, las películas que Steven Spielberg dirigió o produjo marcaron nuestra infancia. Las aventuras de Indiana Jones, Los Goonies, Regreso al futuro o E.T. son una referencia fundamental para muchos de nosotros, que crecimos con esas aventuras y aprendimos a respetar el nombre de Steven Spielberg y a añorar su manera de hacer esas películas tan icónicas de los ochenta. Super 8 recoge, como todos sabemos desde los primeros tráilers, ese espíritu y trata de recrear, pese al escepticismo general, en un homenaje a las películas de aventuras de los años 80.

Joe vive en Lillian, Ohio. Nos encontramos en 1980, Joe ha perdido a su madre y su padre, policía del pueblo, no le presta demasiada atención. El chico emplea su tiempo en ayudar a su mejor amigo, Charles, a rodar una película de zombies para un festival valiéndose de una cámara de súper 8. El comienzo de las vacaciones estivales viene marcado por la ayuda de una chica al grupo: se trata de Alice Dainard, que obtiene un papel en la película amateur. No obstante, durante el rodaje en la estación de tren, los chicos presencian un escalofriante suceso: una camioneta se cruza con el tren que cruzaba las vías y lo hace descarrilar. Al día siguiente, el pueblo comienza a llenarse de militares y una serie de extraños sucesos comienzan a alterar la tranquila vida de los habitantes de Lillian.

Aunque el argumento en sí no es novedoso (personalmente le encontré trazas de District 9), el desarrollo es interesante y, sobre todo, cuenta con un valor añadido: los personajes. Los cinco niños protagonistas están desarrollados de una forma cargada de realismo y actúan muy bien, especialmente Joel Courtney como Joe, que mantiene el peso del protagonismo de manera admirable para su edad. Los demás actúan como contrapunto cómico (sobre todo Martin y Cary, interpretados por Gabriel Basso y Ryan Lee respectivamente), ya que el personaje femenino, Alice, también tiene un carácter bastante dramático e incluso clásico como "dama en apuros" en cierto momento del filme.

En general, Super 8 tiene una calidad sobresaliente, está muy bien filmada y, aunque sabemos lo que va a pasar, mantiene una tensión interesante aderezada por algunos chascarrillos que se les escapan a los personajes, niños al fin y al cabo, que actúan como tales, para variar.

Puntuación: 9

domingo, 21 de agosto de 2011

Lo que el viento se llevó

Ésta es la única imagen que he encontrado en Internet de mi edición de la novela.


Título: Lo que el viento se llevó
Autor: Margaret Mitchell
Año de publicación: 1936
Editorial: Aymá S.A.

Los que dicen que detrás de un hombre hay una gran mujer (Groucho Marx añadiría: "y detrás, está su esposa") deben reconocer que igualmente justa es la aseveración de que detrás de una gran película hay una gran novela. Normalmente hay una gran novela detrás de una película regular o sencillamente mala, pero una no pierde la esperanza cuando comprueba que hay buenas películas hechas de buenos libros. Un buen ejemplo de ello es Lo que el viento se llevó, inmortal en el cine gracias a la celebérrima adaptación de 1939 dirigida por Victor Fleming. Lamentablemente, en mi opinión la novela es más desconocida para el gran público que el drama romántico protagonizado por Vivien Leigh y Clark Gable. Me gustaría que quienes lean esta crítica sientan cierta curiosidad por la novela ganadora del premio Pulitzer que se vio reflejada en el cine en tan sólo tres años.

Scarlett O'Hara es una orgullosa belleza del Sur, hija de un terrateniente irlandés. Pese a ser admirada como la muchacha más bella del condado, ella está enamorada de Ashley Wilkes, cuya plantación linda con la de su familia. No obstante, Ashley está predestinado a contraer matrimonio con su prima Melanie Hamilton, y Scarlett, despechada, no concibe otra venganza que casarse con Charles, hermano de Melanie. La Guerra de Secesión empieza poco después, llevando a los maridos de las dos mujeres al frente y convirtiendo a Scarlett en prematura viuda, por lo que se traslada a Atlanta junto a su cuñada Melanie y la tía de ésta, la impresionable Pittypat. Los duros meses de la contienda transcurren suavizados por la ayuda del capitán Rhett Butler, un arrogante vividor de Charleston que conoce todos los puntos flacos de Scarlett y aún así está locamente enamorado de ella.

La novela sigue el transcurso de la vida de Scarlett durante unos doce años, aproximadamente, desde los meses previos a la Guerra hasta el final de la posguerra, y a diferencia de la famosa adaptación cinematográfica, ella es la protagonista absoluta, mientras que Rhett no es una presencia constante en la trama hasta las últimas doscientas páginas, aproximadamente; antes, sus apariciones son esporádicas, pero no por ello menos importantes.

Y es que la novela original es bien larga: se explica que la película sea recordada como una de las más largas de la era dorada de Hollywood (frisa las cuatro horas), ya que tiene la tarea nada desdeñable de adaptar un millar de páginas en las que se desarrollan detalladamente toda clase de dramas personales y familiares de los que Scarlett logra salir ilesa gracias a su inquebrantable y orgullosa personalidad. El desarrollo del personaje está muy logrado, no se intenta que simpaticemos con ella, sólo que comprendamos su manera de actuar frente a las vicisitudes con las que se topa. El resto de los personajes, aunque parten de estereotipos, tienen momentos muy interesantes, en especial el matrimonio Wilkes, aunque la novela tiene ocasión de describir a todos los enemigos de Scarlett más allá de India Wilkes. Además, gracias a la novela conocemos a personajes importantes en la trama que desaparecen en la película, como Will Benteen o los propios hijos de Scarlett.

Lo que el viento se llevó es una auténtica epopeya histórica que refleja la Guerra de Secesión como la inmensa catarsis que supuso para la gente del Sur de los Estados Unidos, más allá de la imagen esclavista de los dueños de las plantaciones y otros estereotipos clásicos de los vencedores sobre los vencidos. La autora, natural de Atlanta, donde se desarrolla la mayor parte de la novela, ofrece su visión de la derrota y de la sociedad de ese tiempo, una sociedad que vio su fin con el desenlace de la guerra, además de acercar posiciones a los vencedores, reflejando en sus páginas que ellos mismos no se encontraban tan lejos de aquello que achacaban a la gente del Sur.

Puntuación: 10

miércoles, 17 de agosto de 2011

Al otro lado

Imagen de Impawards
Título: Al otro lado (Auf der anderen Seite)
Director: Fatih Akin
Intérpretes: Baki Davrak, Nurgül Yesilçay, Patrycia Zyolkowska, Hanna Shygulla
Año de estreno: 2007

Después de dos semanas en Berlín sin oportunidad de actualizar el blog, estas primeras entradas de agosto están dedicadas a los libros y películas de los que he tenido ocasión de disfrutar durante mi estancia en el extranjero. Pero en el caso de la película Al otro lado, es especial, ya que la vi en versión original en clase de alemán. Aunque el propósito de verla era principalmente didáctico y por lo tanto, no tuve ocasión de verla tan detenidamente como cualquier otra película, me gustó tanto que decidí realizar una crítica de ella para compartirla con todos vosotros.

Al otro lado nos cuenta las historias cruzadas de Nejat, un profesor universitario de Alemán de ascendencia turca, y Ayten, una joven kurda activista por los derechos humanos. Sin conocerse, sus vidas están estrechamente enlazadas: el padre de Nejat mantiene una relación con una prostituta de origen turco llamada Yeter, a la que mata accidentalmente, y Nejat decide buscar a su hija para financiar sus estudios. Todo cuanto sabe de la chica es su edad y su nombre: Ayten. Con el objetivo de buscarla, Nejat deja su cómoda vida en Hamburgo y se marcha a Estambul. Mientras, Ayten se ve perseguida por la policía tras una manifestación y se ve obligada a emigrar de manera ilegal a Alemania, donde conoce a una universitaria llamada Lotte que le ofrece vivir con ella a pesar de la reticencia de su madre, Susanne.

Al otro lado me recordó a Babel por los cruces de personajes que no se conocen pero que tienen mucho que ver, las barreras del idioma y la cultura y las casualidades convertidas en destino, o viceversa. Pero a diferencia de la cinta protagonizada por Brad Pitt y Cate Blanchett, Al otro lado tiene un desenlace redentor en el que se puede afirmar que "todo acaba bien" pese al sabor agridulce que nos dejan algunos acontecimientos. La trama trata, además, el tema de la inmigración turca en Alemania, un asunto espinoso cuyas distintas facetas se nos muestran a lo largo del metraje. Pese a la crudeza de ciertas secuencias, Al otro lado posee una extraña ternura en otros fragmentos, creando un equilibrio que se completa con la magnífica interpretación de los actores (destaca una impresionante Hanna Shygulla) y una banda sonora plagada de motivos turcos.

Puntuación: 7

martes, 16 de agosto de 2011

Hush, hush

Imagen de Wikipedia
Título: Hush, hush
Autor: Becca Fitzpatrick
Año de publicación: 2009
Editorial: Ediciones B

Tras el boom de los vampiros en la narrativa juvenil, empieza a ser hora de que se renueven las especies sobrenaturales que protagonizan sus historias junto a la adolescente humana de turno. De momento hemos visto licántropos, ángeles, hadas y nefilims, pero es esta saga de dos volúmenes (por el momento) la que introduce a una nueva criatura, aunque su identidad no se averigüe hasta bien avanzada la novela.

Hush, hush tiene por protagonista a Nora Grey, una chica delgada y desgarbada que está sometida a terapia psicológica tras el asesinato de su padre un año atrás. Nora es reservada y algo tímida, algo que contrasta vivamente con el carácter de su mejor amiga, Vee, que intenta por todos los medios que Nora se eche novio. Ella se niega en redondo hasta que entra en su vida un misterioso estudiante nuevo llamado Patch Cipriano con especial predilección por sacarla de sus casillas… algo que se torna perturbador cuando empiezan a pasar cosas muy raras en torno a ella.

La verdad es que, a pesar de incluirse dentro del grupo de la narrativa juvenil tapa con tapa con novelas tipo Crepúsculo o Crónicas vampíricas, Hush, hush no contiene la carga romántica de éstas. De hecho, la autora carga las tintas durante la mayor parte de la novela en el suspense en que se ve sumergida Nora cuando le suceden los extraños e inexplicables sucesos que alteran su vida, a lo que se suma el completo desconocimiento de la persona que se encuentra tras ellos (nos da alguna sorpresa al final) o la verdadera naturaleza de Patch, que no desvelaré para no destripar el que se supone que es uno de los grandes misterios del libro.

En mi opinión el punto fuerte de Hush, hush es precisamente su protagonista, que se aleja de las chicas frágiles y/o perfectas de esta clase de novelas para presentarse como un personaje atormentado y creíble: no es débil para que el chico venga y la proteja, sino que ha pasado por una serie de experiencias de las que dejan secuelas. En cambio, Patch, aunque tiene sus momentos, revela en algunos fragmentos el esfuerzo de la autora por crearle un magnetismo a la altura de otros héroes de novelas similares (véanse las ya mencionadas), pero tanto misterio acaba haciéndole un tanto insulso y a ratos pesado. En cuanto al desarrollo de la historia, tiene un punto para enganchar gracias a la narración subjetiva, que hace que nos metamos en la piel de Nora, y aunque el desenlace tiene ciertos fallos que le restan espectacularidad, reserva alguna que otra sorpresa.

Puntuación: 6

lunes, 15 de agosto de 2011

Pequeñas mentirosas

Imagen de fantasymundo.com
Título: Pequeñas mentirosas
Autor: Sara Shepard
Año de publicación: 2006
Editorial: La Factoría de Ideas

Los libros ya no se adaptan únicamente en películas, ahora también se hace en series. El formato televisivo es, además, el más adecuado para plasmar con fidelidad los argumentos de varias entregas de una saga, y las editoriales no tienen que asumir el riesgo de publicar algo sin saber de antemano si tendrá éxito, ya que, si la adaptación gusta, sin duda alguna ya tienen una serie de libros vendidos. Es lo que ha venido pasando con Pequeñas mentirosas, cuyo éxito en Estados Unidos ha animado a La Factoría de Ideas a sacar a la luz la primera entrega de esta saga de ocho volúmenes.

Las vidas de Aria, Hanna, Spencer y Emily dan un vuelco al desaparecer Alison, la amiga común de todas ellas, que las hacía permanecer al mismo grupo. Entre el horror y el alivio, pues Alison era muy aficionada a compartir secretos con sus amigas y cosas de ellas que no querían que los demás supieran, las cuatro se separan y retoman sus vidas sin volver a juntarse hasta tres años más tarde, cuando Aria regresa de pasar ese lapso de tiempo en Islandia y alguien que se hace llamar “A” comienza a enviarles inquietantes mensajes dando a entender que conoce todos esos secretos que sólo Alison conocía y que tanto se han preocupado por sepultar.



A simple vista, el argumento es el mismo que el de la serie, ¿verdad? Sin embargo, lo que en mi reseña contaba como punta del iceberg de todo lo que sucede a partir de este punto de partida, en la primera entrega de esta saga literaria es todo su desarrollo. Y es que la primera novela de Pequeñas mentirosas queda adaptada en los primeros episodios de la serie, ya que la autora se entretiene detallando el aspecto físico de los personajes, su estilo de ropa y las sensaciones que experimentan. Pequeñas mentirosas es, en su desarrollo, increíblemente conciso, casi táctil en su manera de explicar cómo son las chicas y las cosas que les rodean, sin dejar de ser coloquial.



¿Curiosidades respecto a la adaptación? De momento, sólo tres personajes de la novela (de las que dos son secundarias), Aria, Maya y Jenna, se corresponden físicamente con el aspecto que presentan en la serie; los demás no tienen nada que ver respecto a la descripción que Sarah Shepard nos hace de ellos (de hecho, mientras leía el libro me decía: “¡pero si son todos rubios!”. Además, uno de los personajes del libro se desdobla en dos en la serie (no diré cuáles) y, desde luego, la huella del filtro que un canal familiar como ABC Family se deja notar al comparar su serie con el libro: en éste los personajes beben, fuman y no se velan en absoluto temas como la bulimia, las relaciones sexuales o el abuso de medicamentos.


Puntuación: 8