domingo, 29 de diciembre de 2013

Flores para Algernon

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Título: Flowers for Algernon (Flores para Algernon)
Autor: Daniel Keyes
Año de publicación: 1966
Editorial: S.F. Masterworks

Una de mis mejores amigas, bióloga y apasionada de la ciencia, suele criticar el empleo de dicha palabra en la construcción del término ciencia ficción, ya que muchas historias de este género carecen, a la hora de la verdad, de toda base relacionada con dicha disciplina. No voy a entrar en esa discusión, pero sí debo decir que, cuando leí Flores para Algernon sentí que había dado, por fin, con una novela de ciencia ficción que se adaptaría a su criterio y que a todas luces disfrutaría.

Flores para Algernon tiene como protagonista a un hombre llamado Charlie Gordon. A través de las entradas de su diario descubrimos de él que es un deficiente mental escogido por un grupo de científicos para llevar a cabo una cirugía experimental que incrementará su inteligencia. El anterior sujeto en que se llevó a cabo dicha operación, un ratón de laboratorio llamado Algernon, se convierte en un modelo a seguir para Charlie, que desde niño sólo ha deseado ser inteligente y querido. Tras el éxito de la operación, la inteligencia de Charlie se incrementa gradualmente, y la vida se abre ante sus ojos en todo su horror y belleza.

Me ha sorprendido descubrir que esta novela fue publicada en España por Barco de Vapor, una las colecciones de narrativa infantil más conocidas de nuestro país. Flores para Algernon incluye profundos discursos sobre el valor de la ciencia en sus éxitos y fracasos, el lugar de los disminuidos en la sociedad, las expectativas de los seres humanos, la inteligencia en relación con las emociones y un largo etcétera. El personaje de Charlie experimenta una apasionante evolución que queda plasmada de manera hipnótica en su diario, a través del que percibimos de muchas maneras cómo va cambiando el personaje.

Daniel Keyes pergeñó durante catorce años la historia corta en la que se basa esta novela, que ha recibido innumerables premios especializados. Se trata de su trabajo más conocido, y tanto si os gusta la ciencia ficción como si no, merece la pena echarle un vistazo.

Puntuación: 9

El Grinch

Título: El Grinch (How the Grinch stole Christmas)
Director: Ron Howard
Intérpretes: Jim Carrey, Taylor Momsen, Christine Baranski, Jeffrey Tambor
Año de estreno: 2000

Nunca me he considerado una persona especialmente navideña. Como mi cumpleaños cae apenas unos días antes de Nochebuena, para mí ha sido tradicionalmente la época en que se reciben muchos regalos y toca estar con la familia. Este año ha sido diferente, y las celebraciones han tenido por primera vez un valor especial por haber estado lejos de la familia. Por eso, cuando mis compañeros de piso propusieron que viéramos películas de Navidad en Nochebuena, no me opuse, para variar, y así fue como descubrí al Grinch.

Todos los habitantes de Villa Quién esperan y celebran la Navidad con gran regocijo. ¿Todos? ¡No! El Grinch, desagradable inquilino del vertedero, desprecia la festiva época. Huraño y esquivo, el Grinch pasa todo el año en su vivienda subterráneo, odiando a los habitantes de Villa Quién, pero todo cambia cuando la pequeña Cindy Lou, decidida a descubrir el verdadero significado de la Navidad, acude en su busca. Tras una desafortunada visita a la ciudad, el Grinch decide llevar a cabo la mayor afrenta imaginable contra Villa Quién: robar la Navidad.

Hasta hace poco, el Dr. Seuss era un perfecto desconocido en España, pero afortunadamente las adaptaciones cinematográficas de sus libros infantiles le han ido acercando al público no angloparlante. Cómo el Grinch robó la Navidad es uno de los más clásicos, y ha visto numerosas adaptaciones animadas. Esta versión en imagen real contó con una elaborada labor de maquillaje y atrezzo para recrear el mundo del Dr Seuss de la manera más fiel posible, y gracias a las muecas del cómico visual por excelencia, Jim Carrey, el icónico personaje goza de un carisma que trasciende lo arquetípico de la historia original para darle un encanto muy especial.

A pesar de tratarse de una película navideña, El Grinch no es exclusiva de esta época del año: su sentido del humor, sus gags y, ante todo, el personaje del Grinch hacen de ella un pequeño clásico a descubrir. O a redescubrir.

Puntuación: 8

miércoles, 25 de diciembre de 2013

El hobbit: La desolación de Smaug

Título: El hobbit: La desolación de Smaug (The hobbit: The desolation of Smaug)
Director: Peter Jackson
Intépretes: Martin Freeman, Richard Armitage, Luke Evans, Evangeline Lilly
Año de estreno: 2013

Parece que entre 2012 y 2014 vamos a tener ese estreno navideño que los fans esperan con ansia. Cuando yo era niña, ese honor pertenecía a Disney, pero desde que Peter Jackson logró sacar adelante su adaptación de El hobbit, el mérito es todo suyo. Un viaje inesperado sirvió para abrir boca y dejarnos a todos con los ojos a bolillas con su nueva recreación de la Tierra Media, corregida y aumentada gracias a los avances que ha visto el cine desde que El Señor de los Anillos vio la luz (trece años va a hacer del estreno de La comunidad del anillo, nada menos), y con La desolación de Smaug seguimos las aventuras y desventuras de Bilbo Bolsón, Thorin Escudo de Roble y su compañía de enanos para alcanzar el corazón de la Montaña Solitaria.

Perseguidos por Azog y sus orcos, Bilbo, Gandalf, Thorin y los enanos buscan refugio en casa de Beorn. Gracias a éste recuperan fuerzas para volver a encaminarse a la Montaña Solitaria, pero de camino tendrán que enfrentarse a los peligros del Bosque Negro y a los altivos elfos que lo habitan antes de alcanzar Esgaroth, el humilde pueblo a los pies de la Montaña Solitaria, donde el arisco Bard se convertirá en su cicerone. Mientras tanto Gandalf, separado de la compañía a las puertas del Bosque Negro, investiga por su cuenta los extraños sucesos que tienen lugar en la Tierra Media y que anuncian que un mal más grande que cualquier otro se prepara para hacer acto de presencia.

Ya se anunció, cuando se confirmó que El hobbit, un libro infantil y bastante corto, iba a ver la luz en forma de tres películas, que Peter Jackson iba a tirar mucho de apéndices y anotaciones con los que Tolkien amplió el universo que había creado y en el que se desarrollaron sus obras. Es en La desolación de Smaug donde esas partes comienzan a cobrar un protagonismo importante, pues nos permiten conocer, por ejemplo, el periplo de Gandalf al separarse de Bilbo y la compañía de enanos. Sin embargo, las novedades no se detienen ahí, ya que como toda adaptación literaria, la trilogía de El hobbit cuenta con sus licencias, entre otras la introducción de Tauriel, una elfa silvana que me produce sentimientos encontrados, pues aunque el personaje me gusta, encuentro que introducir con calzador un personaje femenino sólo porque si no hay una chica, alguien se quejará, es un mal criterio y además traiciona el espíritu de la obra: no olvidemos que, para bien o para mal, El hobbit se publicó a finales de los años 30.

Visualmente, La desolación de Smaug resulta tan espectacular como su predecesora; es más, los 48 frames por segundo aportan al metraje una textura sencillamente espectacular. Caracterización y fotografía apoyan la épica aventura en que Bilbo deja de ser protagonista absoluto para dejar un poco de espacio a los demás personajes, entre los que destaca Legolas, un viejo conocido.

Puntuación: 8

domingo, 22 de diciembre de 2013

Darkness, be my friend

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Título: Darkness, be my friend
Autor: John Marsden
Año de publicación: 1996
Editorial: Scholastic

No es la primera vez que una editorial me traiciona dejando tirada una buena serie, pero el caso de la saga Mañana me ha resultado casi ofensivo. Con el tirón de Los Juegos del Hambre, Molino podría haber sacado adelante esta excelente saga que, aunque ha llegado tarde a nuestro país, tiene mucha fuerza y una personalidad lo bastante marcada como para llegar a gustar. Carece del grado de romance que muchos lectores buscan en la narrativa juvenil, pero no olvidemos que tampoco Los Juegos del Hambre hace alarde de ese elemento y aun así ha triunfado. Con la saga abandonada por su editorial española en el tercer volumen, he tenido que recurrir al idioma original para reengancharme a las desventuras de Ellie y sus amigos.

Tras los acontecimientos sucedidos en Mañana. Muerte blanca, nuestros protagonistas se encuentran por fin a salvo. Ellie, Homer, Fi, Kevin y Lee tratan de recuperarse de las secuelas de la guerra que asola Australia, pero la tregua entre los cinco adolescentes y el conflicto no dura demasiado, pues se les encarga la misión de guiar a un grupo militar hasta el corazón de Wirrawee, su pueblo natal. Los temores más profundos, las pesadillas más oscuras y los sentimientos más dolorosos afloran cuando el grupo se ve obligado a enfrentarse de nuevo con la parte más alterada de sus viejas vidas.

A medida que la serie avanza se hace más evidente que la supervivencia tanto física como psicológica es el ingrediente más importante en esta historia. El grupo protagonista se ve contra las cuerdas en cada giro de la trama, y los límites de la supervivencia se ven forzados un poco más cada vez que les sucede algo nuevo e inician alguna de sus particulares misiones. El resto es secundario, y las escasas concesiones al romance resultan forzadas en medio del percal en que se encuentran los personajes. A cambio, la narración en primera persona por parte de Ellie nos ofrece una visión realista de la evolución de un personaje en situaciones límite. Creo que una de las cosas que más me gusta de la saga Mañana es, precisamente, la semblanza que se nos ofrece de una verdadera heroína, alguien capaz de hacer cosas increíbles pero sin dejar de ser humana, con sus miedos, sus reflexiones y, ante todo, su innato instinto de supervivencia.

Puntuación: 8

domingo, 1 de diciembre de 2013

Kiss Kiss Bang Bang

Título: Kiss Kiss Bang Bang
Director: Shane Black
Intérpretes: Robert Downey Jr., Val Kilmer, Michelle Monaghan, Corbin Bernsen
Año de estreno: 2005


Cuando se anunció que Jon Favreau no dirigiría Iron Man 3, sino que dicha tarea recaería sobre Shane Black, muchos fans se echaron a temblar. La saga del Hombre de Hierro era la más sólida antes del bombazo de Los Vengadores, una película que puso el listón muy alto a las que le seguirían. Fue el propio Robert Downey Jr. quien salió en defensa del nuevo director: había trabajado con él en esta cinta, Kiss Kiss Bang Bang, que Downey cita como el mejor trabajo de su filmografía. Como fan devota que soy, no podía comprobar si la afirmación de Robert Downey Jr. era cierta.

Harry Lockhart es un ladrón de medio pelo que, escapando de la policía tras un golpe fallido, acaba metiéndose en un casting para interpretar al protagonista de una película de detectives. Leyendo el guión tiene un arrebato emotivo que le consigue el papel y acaba en Los Angeles a la espera de realizar las últimas pruebas. En una fiesta en casa de Harlan Dexter, un actor retirado, Harry conoce a Perry van Shrike, alias Gay Perry, un detective privado contratado por la agencia para entrenarle en el papel que va a interpretar, y más tarde se reencuentra con Harmony Lane, su amor platónico durante el instituto. Durante una de las lecciones con Gay Perry en que siguen al novio de una clienta, los dos hombres acaban rescatando el cadáver de una chica de un coche en un lago, y así es como se ven envueltos en un rocambolesco crimen.

Kiss Kiss Bang Bang es, en conjunto, una extraña mezcla de cine policíaco y humor que, sin caer en lo soez, resulta delirante, divertida e interesante a la vez. El debut como director de un experto guionista como es Shane Black resulta evidente al comprobar cómo todos estos elementos se combinan a la perfección para realizar una parodia inteligente de las clásicas novelas malas de detectives. La película cuenta, además, con las brillantes interpretaciones de los tres protagonistas, Robert Downey Jr. como Harry, Val Kilmer como Gay Perry (sencillamente sensacional) y Michelle Monaghan como Harmony.

Kiss Kiss Bang Bang es una película con mucha personalidad y una buena dosis de humor inteligente que parece haber desaparecido de la mayor parte de las producciones hollywoodienses contemporáneas. Ya podían aprender otros.

Puntuación: 8