Título: Blancanieves
Director: Pablo Berger
Intérpretes: Macarena García, Sofía Oria, Maribel Verdú, Daniel Giménez Cacho
Año de estreno: 2012
Desde hace unos años asistimos a un particular revival de los cuentos clásicos en el cine. Se ha criticado mucho a Disney la versión excesivamente almibarada de estos relatos que realizó en algunos de sus títulos más icónicos, y numerosos cineastas se han dedicado a relanzar esas historias con unos adecuados toques de acción, vestuario atractivo y cierta inspiración steampunk en determinados aspectos de la ambientación. Sólo para este 2013 tenemos pendientes Hansel y Gretel, cazadores de brujas, Oz: un mundo de fantasía y Jack el cazagigantes (y seguro que me dejo alguno en el tintero), pero el 2012 tuvo una protagonista absoluta, y fue Blancanieves, de la que se estrenaron tres filmes: los hollywoodienses Blancanieves (Mirror, mirror, es su título original), Blancanieves y la leyenda del cazador y la "españolísima": Blancanieves.
Esta versión del cuento de los hermanos Grimm se desarrolla en Sevilla, en los años 20. Antonio Villalta, un famoso torero, sufre una cogida en La Colosal, y su esposa, la cantaora Carmen de Triana, se pone de parto debido a la impresión. El torero queda tetrapléjico y su mujer fallece al dar a luz a una niña a la que él se niega a ver. Carmencita crece a cargo de su abuela, pero tras el fallecimiento de ésta, la nueva esposa de Antonio, Encarna, la acoge en el cortijo, donde la obliga a ejercer de criada. Carmencita no tarda en averiguar lo malvada que es su madrastra, pero en su desdicha, padre e hija establecen un vínculo prematuramente cercenado por Encarna, que, años después, tras desembarazarse de su esposo, decide hacer lo propio con Carmencita.
Lo bueno y lo malo de adaptar cuentos clásicos es que, independientemente del envoltorio, el espectador sabe de qué va el tema. En este caso, Blancanieves es la "españolísima", como la he tildado en el primer párrafo, por la propia ambientación de la trama, pues la vida de sus personajes gira, fundamentalmente, en torno al toreo, y en menor medida al flamenco. No obstante, el director consigue alejarse del topicazo e imbuir a las escenas de una elegancia muy particular, con un uso del blanco y negro que crea unos cuadros de gran belleza, de alargadas sombras que aportan a la película ese aire ligeramente gótico y decadente.
Y ahora viene la parte negativa de la crítica. Quizá sea un poco dura, pero quiero señalar, antes de comenzar a citar los defectos que le he encontrado, que pese a no gustarme en general el cine español, me he enfrentado a Blancanieves libre de prejuicios, porque la idea y los tráilers que había visto me la hacían muy apetecible. Y sin embargo, debo decir que no me han gustado ni el uso de la música cinegética, que no se ciñe al uso que se hacía de la misma en el auténtico cine mudo (y con lo de auténtico me refiero al de principios de siglo, y la música en sí me pareció magnífica y muy apropiada) ni el empleo de los intertítulos (excesivos, parecían un poco fuera de lugar en determinadas escenas) ni el frenético montaje de las escenas de acción (en la primera está bien, en la segunda resulta llamativo que se haya utilizado exactamente el mismo recurso, a partir de la tercera resulta aburrido y poco emocionante) ni el ensalzamiento de la actuación de Maribel Verdú como Encarna. Es muy notable por su parte que se adhiriera al proyecto tan pronto y lo apoyase activamente, pero su actuación ha eclipsado por completo a Sofía Oria y a Macarena García como Carmen niña y adolescente, cuando ambas realizan unos papeles extraordinarios, sobre todo la primera. El resto de los actores, tanto las figuras más notables de nuestro cine (destaco a una maravillosa Ángela Molina como la abuela) como los más desconocidos (los enanitos son geniales, sencillamente), realizan también unos papeles magníficos que, desde mi punto de vista, no han sido lo bastante reconocidos.
A pesar de esos defectos que señalo, Blancanieves es una película muy interesante y emotiva, bien llevada y con una atmósfera muy diferente a las típicas películas españolas. Muchos esperaban que llegase a los Óscar. Lástima.
Puntuación: 7