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Director: Carlos Iglesias
Intérpretes: Carlos Iglesias, Javier Gutiérrez, Nieve de Medina, Isabel Blanco
Año de estreno: 2006
Cualquiera que me conozca un poco sabrá ya que no soy ninguna fan del cine español. Lo encuentro monotemático en exceso, y las pocas películas rodadas en mi país que han llegado a gustarme son auténticas rarezas dentro mi lista de títulos preferidos. La verdad es que me viene de familia, pues en mi casa no nos entusiasma a ninguno el cine español salvo contados ejemplos, y de éstos, Un franco, 14 pesetas es una de esas escasas películas que mis padres disfrutaron y me recomendaron. Y aunque mis gustos cinematográficos difieren bastante de los suyos, me fié de esa recomendación al ponerme a ver esta película.
Martín y Marcos son dos amigos que, a principios de los años 60, son despedidos de la fábrica en la que trabajan. Desesperados por hallar un nuevo trabajo, los dos madrileños se marchan a un pequeño pueblo en el norte de Suiza, donde les sorprende la opulencia y la sensación de libertad en comparación con lo que han conocido. Tras un año de trabajo en una fábrica local, Pilar, la mujer de Martín, descubre que el dinero de todo un año de trabajo que éste le envió para pagar un piso a las afueras de Madrid se ha desvanecido al desaparecer la promotora, de manera que Pilar y Pablo, su hijo, se marchan a Suiza también para unirse a Martín y salir adelante.
Ahora que la situación económica en España es la que es y no son pocos los que tienen que emigrar para encontrar trabajo, la historia que nos cuenta Un franco, 14 pesetas resulta tristemente cercana. Sin embargo, a diferencia de las innumerables películas que se regodean en el drama al narrar una historia que se desarrolla en la posguerra o el franquismo, Un franco, 14 pesetas recurre a los recuerdos infantiles del director y guionista, Carlos Iglesias, para crear una historia repleta de nostalgia y ternura en la que se nos muestran las vicisitudes de los inmigrantes y las dificultades para adaptarse a maneras de ser de otros países que, en ciertos momentos de nuestra Historia, parecían hallarse a años luz pese a encontrarse en el mismo continente.
Puntuación: 9
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