lunes, 28 de noviembre de 2011

Damon: El retorno

Imagen de www.casadellibro.com

Título: Damon: El retorno (Crónicas Vampíricas V)
Autor: L. J. Smith
Año de publicación: 2009
Editorial: Destino

Lo dije cuando redacté la crítica de Furia e insisto en ello: L. J. Smith está haciendo caja con esta saga, casi más incluso que cuando se publicaron sus cuatro volúmenes iniciales. "Curiosamente" su anuncio y posterior publicación de una historia que continuaba las Crónicas Vampíricas coincidió con la fiebre Crepúsculo a nivel global que siguió al estreno de la película que adaptaba la primera entrega de aquella saga. Damon: El retorno (versión española del original The return: Nightfall, ya que supuestamente el título conjunto para esta nueva trilogía era, precisamente, The return) retoma los sucesos de Invocación con la escasa diferencia de unas semanas entre el desenlace del uno y el comienzo del otro, como si no hubieran pasado diecisiete añazos, que ya es decir, entre sus respectivas publicaciones.

Elena ha vuelto a la vida, aunque todos la dan por muerta. ¿Todos? ¡No! Sus inseparables amigos Bonnie, Meredith y Matt, además de los inevitables vampiros hermanos Stefan y Damon, saben que vive. El regreso de nuestra heroína al plano terrenal resulta harto complicado, y si dicha metamorfosis no fuese complicada per se, una serie de misteriosos acontecimientos sacuden Fell's Church de nuevo: una serie de chicas del pueblo parecen enloquecer, Stefan desaparece como si se lo hubiera tragado la tierra y en el Viejo Bosque suceden toda suerte de cosas raras. Nuestra heroína y sus amigos se ponen a investigar los acontecimientos, y cómo no, Damon parece encontrarse detrás de todo.

Lo siento mucho, lectores y fans (que no son necesariamente los mismos) de Crónicas Vampíricas, pero esta saga era, desde el punto de vista narrativo, a todas luces innecesaria, y su oportunismo es tan evidente que me hizo coger Damon: El retorno con no poco escepticismo. El salto temporal entre la novela precedente y ésta coloca a los personajes en posesión de elementos de los que carecían en las cuatro novelas iniciales, como teléfonos móviles e Internet, que carecen de toda credibilidad cuando te planteas que, de haberlos poseídos en las novelas publicadas entre 1991 y 1992, el desarrollo de éstas habría sido bastante distinto. La autora se decanta, además, por Damon, dándole un peso como personaje que rompe la balanza sobre Stefan de un modo que te hace pensar "Fanservice!!" descaradamente. Todo en esta novela, y sospecho que también en las dos siguientes, grita oportunismo por los cuatro costados, y la calidad de la narración desciende bastante debido a ella, lo cual es una pena, con el listón tan alto que dejaron Invocación y, sobre todo, Furia.

Puntuación: 6

sábado, 26 de noviembre de 2011

Revisión: Ella es el chico

Imagen de Wikipedia
Título: Ella es el chico (She's the man)
Director: Andy Firckman
Intérpretes: Amanda Bynes, Channing Tatum, Laura Ramsey, David Cross
Año de estreno: 2006


Descubrí Ella es el chico cuando estaba en la universidad, y me lancé a ella al descubrir que tenía uno de los elementos que más me gustan en esta clase de películas y en los shôjo manga: un personaje que tiene que travestirse por cualquier motivo. A esto se añadió algo que me encanta, que es la adaptación de obras de Shakespeare a un entorno adolescente. En este caso, la obra elegida es Noche de Reyes, que traslada su escenario del país imaginario de Illyria a un instituto que tiene ese nombre...

Viola Hastings tiene una gran pasión, que no es otra que el fútbol. Así que cuando el entrenador de su instituto decide eliminar el equipo femenino al carecer de suficientes jugadoras y negarle el acceso al equipo masculino, la chica toma la drástica decisión de hacerse pasar por su hermano gemelo, el díscolo Sebastian, y asistir al internado Illyria, cuyo equipo de fútbol es el enemigo jurado del de su antiguo instituto, cuyo capitán es, además, el ex de Viola. A nuestra protagonista le resulta francamente complicado encajar en su nuevo papel a espaldas de toda su familia, sobre todo cuando tiene que lidiar con Olivia, la chica más popular del instituto, que se ha enamorado del Sebastian que Viola ha creado y además empieza a enamorarse de su compañero de cuarto, Duke Orsino.

Seguramente los más puristas denostarán la conversión de una obra de Shakespeare en una comedia juvenil, pero a fin de cuentas, Noche de Reyes es exactamente eso... dentro de su tiempo. Ella es el chico toma las elementos básicos de la obra original como hiciera la ya clásico 10 razones para odiarte, aunque su tono es incluso más humorístico que la versión de La fierecilla domada protagonizada por Julia Stiles y Heath Ledger. Amanda Bynes despliega su vis comica para dar vida a una protagonista solvente que no encuentra un contrapunto lo bastante sólido en el chico, Duke Orsino, un tanto rígido en el papel, pero que también tiene sus momentos. El ritmo de la película y su humor se superponen a sus momentillos cursis (que también los tiene) para dar lugar a una película sencillamente genial.

Puntuación: 9

lunes, 21 de noviembre de 2011

Ciudad de los Ángeles Caídos

Imagen de librariacartabon.com
Título: Cazadores de Sombras 4. Ciudad de los Ángeles Caídos
Autor: Cassandra Clare
Año de publicación: 2011
Editorial: Planeta


Poco a poco me voy poniendo al día en los numerosos libros retrasados que se acumulan en mis estanterías. Lo cierto es que, cuando abrí Ciudad de los Ángeles Caídos me sorprendió haberme demorado tanto en hincarle el diente, dado lo mucho que me gustó la trilogía originaria de Cazadores de Sombras (Ciudad de Hueso, Ciudad de Ceniza y Ciudad de Cristal), pero qué queréis que os diga, hasta para leerme libros soy maniáticamente ordenada. Además, yo soy partidaria de dejar lo mejor para el final, aunque las primeras opiniones que leí de Ciudad de los Ángeles Caídos no eran de lo más elogiosas, que digamos... Pero como soy de las que prefieren formarse un criterio propio, así que decidí darle una oportunidad.

Tras el regreso de Alacante, nuestros protagonistas tratan de llevar una vida normal: Clary se entrena como cazadora de sombras en el Instituto bajo la supervisión de Jace, Simon trata de llevar su vida como humano lo mejor que puede pese a su naturaleza vampírica mientras sale al mismo tiempo con Isabelle y con Maia y Luke prepara su boda con Jocelyn, la madre de Clary. Sin embargo, las cosas no tardan en ponerse feas: una misteriosa vampira llamada Camille parece tener mucho interés en Simon, Jace sufre pesadillas que le atormentan y amenazan su relación con Clary y nuestra pelirroja investiga por su cuenta la aparición en un hospital de un bebé terriblemente alterado, obra de alguien que persigue un fin tan macabro o más que el de Valentine.

La principal queja de los seguidores de la saga se centraba en que Clary y Jace son desplazados como protagonistas principales por Simon, que tiene un papel aún más importante del que tenía en Ciudad de Cristal, aunque eso no significa, claro, que la pareja desaparezca por completo, sino que también tienen un gran peso, y ése es el aspecto que menos me ha gustado de Ciudad de los Ángeles Caídos: a mí me gustan Jace y Clary como pareja y como personajes individuales, pero, ¿tan difícil sería dejar que fueran felices? Parece que los pobres salen de Guatemala para caer en Guatepeor, y sinceramente, en mi mente se difumina la línea entre la compasión y el aburrimiento... La idea de centrar la historia en Simon me parecía bastante más interesante, con la aparición de nuevos personajes y valores en juego, sin olvidar los ya existentes. En cambio, se nos promete eso y se va diluyendo a medida que los conflictos de Jace y Clary se van adueñando de la trama, convirtiendo a Simon en un subterfugio.

A decir verdad, no veo necesaria la continuación de la trilogía original (los dos libros aún por salir, City of Lost Souls y City of Heavenly Fire, además de Ciudad de los Ángeles Caídos, estaban pensados en origen como una nueva trilogía, pero más tarde la editorial se decantó por hacer de los seis volúmenes una hexalogía), que quedaba perfectamente cerrada. Es cierto, en las últimas páginas, la reina de la corte seelie trataba de picar a Clary sugiriéndole que no conocía todos los detalles de la historia de su madre y Valentine, pero ella rechaza averiguarlos porque, según ella, "tiene todo lo que necesita". Ese final era, en mi opinión, sencillamente perfecto, pero al parecer no era suficiente para los editores estadounidenses. Ya se sabe que, si algo vende, hay que exprimirlo.

Tendremos que esperar hasta mayo para ver publicada City of Lost Souls, ya que Cassandra Clare está redactando al mismo tiempo estos tres libros y los tres que integran Cazadores de Sombras: Los Orígenes (el segundo volumen de la trilogía, Clockwork prince, verá la luz en Estados Unidos dentro de un par de semanas), pero francamente, después de haber probado Ciudad de los Ángeles Caídos, tampoco tengo tantas ganas. Irónicamente, a esta novela se le puede aplicar una de las frases empleadas en los volúmenes anteriores: "pesado has sido en la balanza, y hallado falto".

Puntuación: 6

domingo, 20 de noviembre de 2011

Los santos inocentes

La imagen no se corresponde
con la edición citada.
Título: Los santos inocentes
Autor: Miguel Delibes
Año de publicación: 1981
Editorial: Biblioteca El Mundo


Como en otras ocasiones, fue la película lo que me atrajo en dirección a Los santos inocentes. No obstante, en este caso, no he visto la película aún: tan sólo un reportaje sobre ella, que despertó mi curiosidad en torno a la historia narrada en esta famosa novela de Miguel Delibes, de la que me sorprendió cuando tuve el libro en las manos su brevedad: la impresionante historia queda relatada en menos de cien páginas, y en ellas se desarrolla una tragedia protagonizada por unos personajes meticulosamente trazados.

Nos hallamos en el ámbito rural de un cortijo en el que trabaja Paco, el Bajo, un humilde campesino, para una familia de la aristocracia. Paco vive con su esposa, la sacrificada Régula, y sus cuatro hijos: Nieves, Quirce, Rogelio y Charito, apodada la Niña Chica, ya que su deficiencia mental le obliga a estar en una cuna constantemente. Paco trabaja como "secretario" del señorito Iván, el joven y arrogante marqués, cuya mayor afición, rayana con la obsesión, es la caza, y Paco le ayuda con la misma. Azarías, hermano de Régula, también deficiente mental, es despedido de un cortijo cercano y se va a vivir con ellos sin armar demasiado jaleo, dedicado por entero a la cría de una grajilla a la que llama cariñosamente "milana bonita".

En menos de un centenar de páginas, Miguel Delibes crea un retrato desgarrador de la España profunda, de los sinsabores de la vida rural y del trato entre criados y señores en una época no muy lejana. Estos términos pueden sonar parecidos a los que empleé al hablar de Criadas y señoras, y lo cierto es que, salvando las distancias, hay bastante en común entre ambas historias, ya que se desarrollan en épocas cercanas, pero en países completamente distintos. Pero Los santos inocentes posee un carácter muy especial, una dureza revestida con cierta ternura. Delibes no se regodea en la tragedia o la crudeza de la vida de los personajes, sencillamente la expone tal y como es, si bien se permite mostrarnos a Azarías tal y como lo describe su hermana Régula: un inocente.

Puntuación: 10

viernes, 11 de noviembre de 2011

Criadas y señoras

Imagen de Wikipedia
Título: Criadas y señoras (The help)
Director: Tate Taylor
Intérpretes: Emma Stone, Viola Davis, Octavia Spencer, Bryce Dallas Howard
Año de estreno: 2011


Sucede a menudo que lo que para unos es interesante, icónico o representativo no lo es para muchos otros. La novela The help (literalmente, "la asistenta"), de Kathryn Stockett, es un buen ejemplo de ello, ya que fue un auténtico best-seller en Estados Unidos, mientras que en nuestro país pasó un poco sin pena ni gloria, aunque el estreno de su adaptación cinematográfica ha propiciado su reedición. Para los norteamericanos, Criadas y señoras nos habla de un mundo que existió, de una situación nada agradable que tuvo lugar en los conservadores estados sudistas hace menos de cincuenta años.

Eugenia Phelan, alias Skeeter, es una rara avis entre las jóvenes de su extracción social de la ciudad de Jackson, Mississippi: Skeeter fue a la Universidad, aspira a convertirse en escritora y no siente el menor interés en el  matrimonio y la maternidad, para incredulidad y horror de su madre y de las mujeres del Club de bridge, en especial la líder Hilly Holbrook. El primer empleo de Skeeter, en el periódico local, la pone en contacto con una criada afroamericana que sirve a la familia Leefolt, Aibileen Clark, y desde el primer momento la chica siente deseos de contar cómo es la racista sociedad de Jackson a través de los ojos de las criadas. En un principio, Aibileen se resiste a colaborar, pero cuando la tiránica Hilly despide de mala manera a su criada Minny Jackson, las dos mujeres deciden colaborar con Skeeter en la redacción de un libro que llevará por título Criadas y señoras.

La historia culebrea entre varios personajes hasta que el protagonismo de Emma Stone queda diluido entre la actitud altiva de Hilly y sus acólitas, la resignación de las criadas negras, el desparpajo de Celia Foote (interpretada por una brillante Jessica Chastain), el doloroso Alzheimer de la madre de Hilly, la señora Walters (a la que da vida una aún más brillante Sissy Spacek), y la insistencia de la señora Phelan de que Skeeter se case. Este extenso reparto femenino reduce a los hombres a su mínima expresión, y cuando aparecen demuestran estar claramente eclipsados por sus mujeres dentro del ámbito doméstico. El único hombre que tiene algo más de protagonismo es Stuart, novio de Skeeter durante un corto período de tiempo, que demuestra tanto en su primera como en su última aparición que es un cretino...

Criadas y señoras no pretende ser una película de denuncia, aunque muchas escenas hablan por sí solas, sino una exposición de la sociedad de una época en un entorno muy concreto. La colorista ambientación sesentera no pierde credibilidad y la banda sonora, muy correcta, acentúa los momentos más lacrimógenos de la cinta, aunque Criadas y señoras también tiene sus alivios cómicos, con grandes frases incluidas (mi preferida: la dicha por la señora Walters a su hija Hilly a la salida de la fiesta benéfica).

No puede decirse de Criadas y señoras que sea un peliculón de los que crean escuela, pero sí es una historia conmovedora tratada de manera impecable con unas actrices magníficas, que merece la pena descubrir.

Puntuación: 7