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Director: Alfred Hitchcock
Intérpretes: James Stewart, Grace Kelly, Wendell Corey, Thelma Ritter
Año de estreno: 1954
Debo confesar que, cuantas más películas de Hitchcock veo, más me llama la atención su obsesión por las rubias. Kim Novak, Eva Marie Saint, Tippi Hedren... Pero la primera fue Grace Kelly, y sus tres películas con el director británico marcaron los hitos de su carrera como actriz antes de convertirse en Princesa de Mónaco. Y aunque no he visto ni Atrapa a un ladrón ni Crimen perfecto, creo que siempre que vea una imagen de la actriz me costará pensar en ella como en una de las más icónicas rubias predilectas de Hitchcock, en vez de como una modelo digna de Vogue.
El argumento de La ventana indiscreta es de sobra conocido: el fotógrafo L. B. Jeffries, aburrido por el prolongado reposo que le exige su pierna rota, mata el tiempo observando a sus vecinos a través de la ventana de su apartamento. Este improvisado acto de voyeurismo se torna detectivesco cuando Jeff comienza a sospechar que uno de sus vecinos, Lars Thorwald, ha matado a su mujer. Con ayuda de su novia Lisa y su enfermera Stella, Jeff se dedica a atar cabos del supuesto crimen, aunque al principio nadie parece convencido de que lo que Jeff cree que ha pasado sea algo más que un simple malentendido.
Debo reconocer que, aunque conocía de principio a fin el argumento de la película, hubo un momento de tensión insoportable tan bien filmada que me tuvo sobre ascuas. Siempre he pensado que es un plus en el caso de determinados directores, eso de que despierten en ti sorpresa, desconcierto o suspense incluso sabiendo de qué va la película. Pero claro, es Hitchcock, el genio. Aunque La ventana indiscreta no vaya a convertirse en una de mis favoritas, sigue teniendo ese ritmo perfecto, ese montaje sublime, ese estilo de filmación sencillamente impecable. Lo único que me chirrió a lo largo de toda la película fueron la banda sonora (un poco pesada en determinadas secuencias) y los numerosos sonidos diegéticos que, aunque aportan realismo a las escenas (después de todo, el patio de vecinos entero fue reproducido en los estudios de la Paramount), no armonizan bien del todo con las escenas elegantemente filmadas.
Puntuación: 8
Me encanta Hitchcock, y como no, la ventana indiscreta es una de mis pelis favoritas. Tienes razón en la obsesión de Hitch con las rubias platino, pero no sólo era éso, tenía fama de algo sádico y de acosador con sus primeras actrices (Tippi Hedren no sabía cómo quitárselo de encima en Los Pájaros y Marnie la ladrona, Kim Novak más de lo mismo en Vértigo...) Sin embargo, ninguna de esas rubias, incluidas Grace Kelly (que aparte de la Ventana Indiscreta rodó con él Cómo atrapar un ladrón) o Doris Day (en El Hombre que sabía demasiado) eran capaces de decir que no al genio. Sabían que sus papeles en las películas de aquel genio obeso y obseso pasarían a la historia del cine. Una gran reseña, besitos!!
ResponderEliminarGracias! La verdad es que no ha conseguido desbancar a Rebeca y Marnie como mis dos preferidas de Hitch, pero verla ha merecido la pena ;)
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