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Título: El asedio
Autor: Arturo Pérez-Reverte
Año de publicación: 2010
Editorial: AlfaguaraParece que últimamente no se me presentan de novelones que pasan holgadamente de las quinientas páginas. Aunque me gustan las novelas largas y con chicha, estoy un poco cansada después de haber leído El asedio, la última y celebrada novela de Pérez-Reverte, que aunque generalmente es un autor que me gusta bastante, no me ha dejado tan satisfecha como esperaba con esta historia ambientada en el siglo XIX.
Nos encontramos en Cádiz durante el asedio de las tropas francesas, en plena Guerra de Independencia. Rogelio Tizón, un corrupto comisario de policía, se halla envuelto en un turbio caso de asesinatos a latigazos de muchachas en lugares cercanos a donde impactan las bombas francesas. De manera paralela, conocemos a otros personajes muy dispares que hacen su vida en la ciudad asediada: el salinero Felipe Mojarra, la empresaria Lolita Palma, el corsario Pepe Lobo, el taxidermista Gregorio Fumagal y el artillero francés Simón Desfosseux. A través de todos ellos presenciamos el desarrollo de la guerra en todas sus vertientes, y esos personajes que parecen carecer de toda relación entre ellos acaban teniendo mucho en común.
Aunque el desarrollo de la trama es, en sí mismo, interesante, en mi opinión resulta demasiado larga, y llega un momento en que no sabes si es que el autor ha metido demasiada paja o es que sencillamente quiere centrarse demasiado en todos y cada uno de los personajes. Y es que, si de algo puede presumir El asedio es de carecer por completo de cualquier clase de favoritismo hacia los personajes principales: todos aparecen en la misma medida. El problema es que durante gran parte del libro sus líneas argumentales son demasiado diferentes, y el lector no puede evitar sentir más interés por unas que por otras (en mi caso, cuando aparecía Simón Desfosseux, sabía que tocaba aburrimiento). Además, mientras leía los primeros capítulos me daba la impresión (más tarde se fue diluyendo) de que el estilo periodístico de Pérez-Reverte ha acabado contaminando su estilo narrativo por el uso excesivo de frases muy cortas muy seguidas, como sentenciando en todo momento.
Los puntos fuertes de El asedio son la prolija labor de documentación que, sin duda alguna, Pérez-Reverte tuvo que llevar a cabo, y la verdad es que se nota: el ambiente está perfectamente reflejado, y todo Cádiz, desde la alta sociedad hasta los barrios bajos, tienen cabida entre las páginas de El asedio. Y sí, a pesar de todo lo que la he criticado, a pesar de ser tan larga, la trama es verdaderamente interesante.
Puntuación: 7
Tengo la suerte de tener un ejemplar firmado por Perez Reverte, ya que acudí a la presentación del libro en Cádiz. Aunque es cierto que tiene esas debilidades en el argumento y en el estilo narrativo de las que hablas, para una gaditana como yo fue una experiencia increíble leer el libro, caminaba junto a él por las calles de mi ciudad, y me transportó a la época en la que Cádiz era España... El nivel de detallismo y documentación es impresionante, la verdad.
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